domingo, 11 de diciembre de 2016

Airbus DS fans group (y II)


Además de los diversos aparatos de línea regular que pudimos captar ese día también hicieron acto de presencia algunas avionetas a las que por supuesto no dejé pasar:





Uno de las grandes esperanzas del día era la posibilidad de poder fotografiar alguno de los aparatos de Airbus DS cuyas instalaciones se encuentran en este aeropuerto realizando algunos días vuelos de prueba varios de los modelos que aquí se fabrican.


Sabíamos que el A400 que en breve fecha iba a ser entregado al Ejercito del Aire andaba por aquí y albergabamos la ilusión de tener la suerte de contemplarlo rodando a pista con posterior despegue y aterrizaje. Además, la guinda hubiera sido ya presenciar alguno de los Belugas que utiliza la empresa para transporte de fuselajes y otras piezas.

Desgraciadamente ninguna de las dos opciones se convirtieron en realida; sin embargo pudimos presenciar un gran número de operaciones de diversos A400 que compensaron lo anterior. Incluso tuvimos el auténtico privilegio de contemplar como uno de los ejemplares realizaba su vuelo de entrega, a la RAF en este caso.









Tras una maravillosa mañana rodeados de sonidos de obturador, motores y queroseno llegó el momento de marcharse a disfrutar uno de los momentos estelares de la jornada visitando la Torre de Control, uno de los puntos más difíciles de visitar de un aeropuerto y a la vez de los más apasionantes.


En este momento, vuelvo a agradecer la atención prestada por el personal de FerroNATS que nos trató de manera exquisita, con gran paciencia y atendiendo todas nuestras preguntas mientras en grupos de 5 personas contemplábamos alucinados su "sancta sanctorum" y tratábamos de interferir lo menos posible en tan delicada tarea guardando un respetuoso silencio cuando el momento así lo requería.





Ni que decir tiene que uno de los momentos álgidos de esta visita fue la posibilidad de hacer fotos desde la terraza que rodea el habitáculo de los controladores. Es una oportunidad que se da muy pocas veces en la vida de un spotter y que por si sola ya habría hecho que viajar hasta Sevilla hubiese merecido la pena. 






En conclusión, un evento perfecto, muy bien organizado, disfrutado en un lugar privilegiado con camaradas que disfrutan como uno mismo de esta afición y en la que siempre me sentí muy bien tratado desde el recibimiento inicial hasta la hora de partida.

Gracias por la oportunidad, "Airbus DS fans group" ya está aquí.


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